La Organización de las Ciudades del Patrimonio Mundial ofrece a todos los noruegos su más sincero pésame por las numerosas víctimas causadas por el tiroteo de la isla de Utoya y la explosión que se produjo en Oslo el pasado día 22 de julio. Nos faltan palabras para expresar adecuadamente lo que sentimos ante tales actos de terror, de proporciones tan trágicas.

Tan sólo el tiempo permitirá aplacar semejante dolor. No obstante, los noruegos ya han dado pruebas de su determinación a no dejar que este acto de demencia altere la afabilidad, decencia y apertura de su sociedad. Estamos convencidos de que prevalecerán otra vez la entereza y la voluntad de la población noruega.